Cooper Flagg (2.06m) es el gran premio del draft 2025, y no solo por el hype: es un jugador hipercompleto, con impacto real en ambos lados de la cancha y listo para contribuir desde el día uno. No tiene una habilidad élite todavía, pero hace todo bien: defiende con inteligencia y energía, lee el juego a nivel NBA, puede pasar, rebotear, cortar, proteger el aro y castigar errores sin forzar nada. Su ofensiva sigue puliéndose—no es un “go-to guy” uno contra uno—pero tiene buen manejo, visión, y un tiro en desarrollo que ya es confiable en catch-and-shoot. Defensivamente, es una máquina de cerrar posesiones. Cambia en todos los picks, defiende al balón o ayuda, y acelera transiciones con su lectura y anticipación. Su valor no está en cargar con todo, sino en elevar a los que lo rodean. Es adaptable, tiene mentalidad ganadora y está programado para impactar sin necesidad de volumen.
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Cooper Flagg (2.06m) es el gran premio del draft 2025, y no solo por el hype: es un jugador hipercompleto, con impacto real en ambos lados de la cancha y listo para contribuir desde el día uno. No tiene una habilidad élite todavía, pero hace todo bien: defiende con inteligencia y energía, lee el juego a nivel NBA, puede pasar, rebotear, cortar, proteger el aro y castigar errores sin forzar nada. Su ofensiva sigue puliéndose—no es un “go-to guy” uno contra uno—pero tiene buen manejo, visión, y un tiro en desarrollo que ya es confiable en catch-and-shoot. Defensivamente, es una máquina de cerrar posesiones. Cambia en todos los picks, defiende al balón o ayuda, y acelera transiciones con su lectura y anticipación. Su valor no está en cargar con todo, sino en elevar a los que lo rodean. Es adaptable, tiene mentalidad ganadora y está programado para impactar sin necesidad de volumen.
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Cooper Flagg (2.06m) es el gran premio del draft 2025, y no solo por el hype: es un jugador hipercompleto, con impacto real en ambos lados de la cancha y listo para contribuir desde el día uno. No tiene una habilidad élite todavía, pero hace todo bien: defiende con inteligencia y energía, lee el juego a nivel NBA, puede pasar, rebotear, cortar, proteger el aro y castigar errores sin forzar nada. Su ofensiva sigue puliéndose—no es un “go-to guy” uno contra uno—pero tiene buen manejo, visión, y un tiro en desarrollo que ya es confiable en catch-and-shoot. Defensivamente, es una máquina de cerrar posesiones. Cambia en todos los picks, defiende al balón o ayuda, y acelera transiciones con su lectura y anticipación. Su valor no está en cargar con todo, sino en elevar a los que lo rodean. Es adaptable, tiene mentalidad ganadora y está programado para impactar sin necesidad de volumen.
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Cooper Flagg (2.06m) es el gran premio del draft 2025, y no solo por el hype: es un jugador hipercompleto, con impacto real en ambos lados de la cancha y listo para contribuir desde el día uno. No tiene una habilidad élite todavía, pero hace todo bien: defiende con inteligencia y energía, lee el juego a nivel NBA, puede pasar, rebotear, cortar, proteger el aro y castigar errores sin forzar nada. Su ofensiva sigue puliéndose—no es un “go-to guy” uno contra uno—pero tiene buen manejo, visión, y un tiro en desarrollo que ya es confiable en catch-and-shoot. Defensivamente, es una máquina de cerrar posesiones. Cambia en todos los picks, defiende al balón o ayuda, y acelera transiciones con su lectura y anticipación. Su valor no está en cargar con todo, sino en elevar a los que lo rodean. Es adaptable, tiene mentalidad ganadora y está programado para impactar sin necesidad de volumen.
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